Via lucentina (calzada romana del siglo i d. C.)
Esta calzada unía las ciudades romanas de Allon (Villajoyosa) y Lucentum (Alicante). En la segunda mitad del siglo I d. C. Allon creció mucho y se remodelaron los caminos de entrada a la ciudad, como este. Los ingenieros romanos buscaban siempre la línea recta. Esta calzada es similar a la de nuestras carreteras: primero hacían un rebaje del terreno; después hacían un muro de contención en uno de los lados para evitar la erosión por lluvia; rellenaban la trinchera con un primer nivel de tierra apisonada y finalmente echaban una capa de cantos rodados (rudus) que se compactaba para soportar el tránsito de personas y carros. Su anchura es de 4.20 metros (14 pies romanos), suficiente para el cruce de dos carros de 1,40 m. de eje.
¿Cómo hemos recuperado la calzada?
Es sorprendente cómo la calzada romana se conservaba por debajo de la antigua carretera nacional, que estuvo en uso hasta el año 2000. Esta calzada estaba a 1,5 metros debajo del suelo de la calle, y se halló en las excavaciones arqueológicas previas a la construcción de este edificio. Se escogió este tramo por ser el mejor conservado. Se desmontó piedra a piedra y se ha reconstruido a la altura de la calle actual para que lo puedas contemplar.